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Células Madres

Cordón Umbilical

Células Progenitoras

El cáncer, la leucemia, la diabetes, el infarto, la paraplejia, el mal de Parkinson y muchas otras enfermedades de la sangre o congénitas que se han incrementado notablemente, podrán ser tratadas gracias al descubrimiento de las células madre.

 

 

Las células madre están dotadas tanto de la capacidad de autorrenovación, es decir de producir más células madre y al mismo tiempo, de originar células hijas que se convertirán finalmente por diferenciación, en los diferentes tipos celulares especializados y estas se encuentran en la médula ósea y en la sangre del cordón umbilical.

 

 

El trasplante de células placentarias o progenitoras, es uno de los últimos descubrimientos para el tratamiento de padecimientos hematológicos.

 

 

                                 

 

En la década de los 80, se descubrió que la sangre de la placenta posee cualidades diferentes a las de la sangre adulta e incluso diferentes a las de las sangre de un recién nacido varios días después del parto.

 

 

Entre estas cualidades están:

 

    Que la sangre placentaria tiene una concentración elevada de células madre hemopoyéticas, o sea generadoras de las células que conforman la sangre y que tienen gran capacidad proliferativa y

 

    Que casi no existen células responsables de la respuesta inmune: Esto puede ser debido a la tolerancia entre el bebé y la madre y la falta de contactos previos con antígenos o sea con substancias, elementos o microorganismos que provocan la formación de anticuerpos externos.

 

Estas características hacen ver que la sangre del cordón umbilical es una fuente potencialmente útil para realizar transplantes y producir células sanas.

 

Preservación de células madre del cordón umbilical

Recientemente, en Dallas (Texas) Caden Ledbetter, un pequeño de 2 años al cual le habían diagnosticado neuroblastoma, un tipo de cáncer del sistema nervioso de rápido desarrollo, acaba de obtener el alta tras remitir su enfermedad. Seis semanas después de realizarle un trasplante de sus propias células madre recolectadas en el momento de su nacimiento, Caden abandonó el hospital el pasado 11 de febrero, en lo que parece ser un trasplante exitoso y sin vislumbrarse efectos colaterales. Los padres del pequeño, habían preservado la sangre de cordón en el momento del parto con fines meramente preventivos y hoy, dos años mas tarde fue el camino para la curación de su enfermedad. Esto le ha permitido a Caden contar con una fuente de células sin riesgo de rechazo al ser 100% compatibles con el y no necesitar medicación inmunosupresora. Es por eso que el pequeño, además de estar agradecido a sus padres por haberle dado la vida, deberá estarlo también porque en el momento de su nacimiento ellos tomaron la importante decisión de preservar sus células madre del cordón umbilical.
Paralelamente durante ese período, con el creciente número de casos exitosos como el de Caden, ha surgido un intenso debate entre partidarios de la preservación de las células madre en bancos para uso propio y aquellos a favor de hacerlo en bancos públicos (para uso a disposición de quien lo requiera). Todos los que creemos que las células de la sangre de cordón constituyen un tesoro inapreciable, capaz de ayudar a cambiar radicalmente la medicina de hoy y del futuro, deberíamos trabajar mancomunadamente, porque todas las modalidades son adecuadas y útiles, la donación y la guarda personal, y el lema común debería ser: “Si usted cree que debe donar la sangre de cordón de su hijo, hágalo, si cree que debe almacenar la sangre de cordón de su hijo, para él u otro miembro de la familia hágalo. Pero sepa que la peor elección es hacer lo que en la mayoría de los nacimientos se hace hoy en día: descartarla como basura.”
 Las células madres son un tipo especial de células indiferenciadas, que tienen la capacidad de dividirse para originar más células madre idénticas a sí mismas o de especializarse para formar células específicas de diferentes tejidos (sanguíneo, cardíaco, nervioso, óseo, cartílagos). También se las conoce como stem cells, células primordiales, troncales o estaminales. 
Las llamadas células madres de cordón umbilical se encuentran en la sangre del recién nacido, la cual luego del nacimiento una fracción queda retenida en la placenta y en el cordón umbilical. Esta sangre, junto con la placenta y el cordón son habitualmente descartados; pero es conveniente considerar que las mismas poseen un alto contenido en células madre hematopoyéticas (generadores de células sanguíneas) que pueden resultar de enorme utilidad para el tratamiento de afecciones que ese recién nacido o algún familiar compatible puedan padecer en el futuro. Las células madres criopreservadas tienen diferentes usos o aplicaciones, las mismas pueden ser usadas para trasplantes autólogos (o sea uso propio) o para transplantes alogénicos (para terceros como por ejemplo para hermanos).
Actualmente se estima que hay unas 300.000 muestras criopreservadas a nivel mundial. Frente a este panorama, el tener la posibilidad de preservar las células madre al momento del nacimiento implica contar con una oportunidad única para ese recién nacido, ya que se guardan células madre que son 100% compatibles con él y, potencialmente, también pueden llegar a serlo para sus familiares cercanos. Por todo esto, se trata de una decisión que merece cada vez mayor consideración.